Durante mucho tiempo tuve la fantasía de mi mujer cogiera con otro y yo estar presente, ella es morena clara dueña de un cuerpo muy sensual y es muy caliente y ademas le gusta vestir muy atractiva, que levanta un morbo increíble de los hombres que la ven en la calle. un dia decidí proponerle que cogiera con alguien mas y al principio se negaba, asi estuve insistiéndole varios meses, hasta que la convencí. cuando decidimos correr esa aventura, ella se arreglo riquísima, y aunque llena de nervios, la tranquilizaba el hecho de que yo estaría con ella en ese momento.
Nos fuimos a un motel, pedí una botella de tequila la que bebimos casi la mitad, luego ya entonados, le pregunte que como le gustaría que fuera el chico que se la cogería, ella me dijo que le encantan los morenos, de buen físico y sobre todo que estuviera bien dotado. Asi que tome el periódico donde se anuncian agencias de escorts y les dije que deseaba algún chico moreno bien dotado y que debería cogerse a mi pareja estando yo presente, que la tratara con delicadeza y sobre todo que la hiciera gozar mucho, la respuesta de la chica que contesto fue de que tenían a un chico moreno de ojos verdes y que tenia el pene de 22 cm. y muy gruesa, que era todo un experto en complacer a parejas. Me dieron el precio y el tiempo que estaría con nosotros. Me pregunto el hotel y la habitación donde estábamos hospedados y que colgara, que me regresarían la llamada.
Pasaron casi 5 minutos y era la chica de la agencia que me dijo que en 30 minutos llegaría el chico y que llevaría condones y lubricantes; que ya estaba instruido de lo que deseábamos y que el pago era por adelantado. Colgó y yo ya estaba super excitado esperando el momento. Seguimos bebiendo y viendo películas porno, mientras la acariciaba dandole ánimos, le dije: “mi amor, ya viene el chico, tu solo dedicate a sentir, a disfrutar, pidele lo que desees sin detenerte”, ella solo asentía con su cara y por mis caricias en sus muslos y por lo tomada dijo que estaba muy excitada.
Al fin llamaron por teléfono indicándome que estaba entrando al motel el servicio que había pedido, luego tocaron la puerta y le dije a ella que abriera, “Hola” dijo el chico, “soy Ruben y estoy aqui para hacerte feliz” Lo paso al cuarto y el se sento en un sofá, nos pidió el dinero acordado, salió y se lo entrego al chofer del taxi que lo había llevado. Regreso y yo le serví una cuba la que bebió sentado mientras yo le explicaba nuestra fantasía, entonces tomo a mi mujer de la mano y la sento junto a el, mientras yo ponía musica y servia otras copas, la saco a bailar y con sus manos le empezó a acariciar la espalda bajando sus manos hasta sus nalgas, diciéndole que era una chica muy guapa y muy sexy, que seria todo un placer hacerle el amor y que trataría de hacerla gozar al máximo.
Se volvieron a sentar y bebimos otra copa, luego el me pidió que yo la sacara a bailar y que bailando la fuera desnudando, así lo hice y cuando quedo totalmente encuerada, el se le acerco por detrás haciendo un sadwich, le besaba el cuello y fue bajando hasta llegar a sus nalgas, mientras yo le preguntaba si le gustaba, ella estaba muy colorada y me dijo que sentia muy rico, entonces la jale hasta la cama y la acosté, me retire y me sente en un sofá que acerque a la cama, el chico se desnudo y realmente tenia la verga muy grande y muy gruesa, hasta creí que no le iba a entrar a mi mujer, se acerco a ella y le puso su verga en la cara, ella se la agarro y empezó a masturbarlo, que grande la tienes le dijo, entonces el se puso un condón y le untó lubricante en la raja a mi mujer, luego la empezó a besar desde el cuello, los pezones hasta llegar a su raja, volvió a subir otra vez hasta el cuello, quedando su verga en la raja, ella abrió y levanto sus piernas diciéndole al chico, “ya metemela por favor, ya no aguanto las ganas” El le puso la punta de su vergota en la entrada y empezó a penetrarla, ella gimió cuando sintió que iba entrandole, mientras yo estaba como hipnotizado viendo como se le metía ese tremendo animalote, oyendo como gemía de placer y como le decía que queria mas adentro, el chico, se la fue metiendo mas y mas, hasta que mi mujer se vino en medio de muy fueres quejidos de placer, cuando ella acabo de venirse, el le dijo, “preciosa, es justo que tu marido tambien disfrute este momento, asi que subete arriba de mi y que el se siente en la cama para que vea como te comes mi verga” Entonces el se acostó boca arriba, ella se subió sobre el y yo me sente atrás de ella para ver como se comía ese pitote, no lo podía creer, estaba viendo el culo de mi mujer bien abierto y como ella empezó a acomodarse la verga del chico en la entrada de su preciosa raja, entonces el con sus manos le separó las nalgas para que yo viera perfectamente el espectáculo, estaba realmente muy excitado, vi como mi mujer se iba sentando y comiéndose toda la verga, como se le abría demasiado la raja y como fue bajando hasta llegar a sus testículos.
Luego ella empezó a subir y a bajar y yo viendo como sus carnosidades se le salían por lo grueso de la verga, tanto me excite, que no resistí las ganas de acariciarle la espalda hasta las nalgas, ella solo decía “que rico siento, estoy totalmente llena, ven mi amor me dijo”, yo obediente me acerque a ella y me pidió que la besara, la bese y el chico tomo una de mis mano y la llevo a una chiche de mi mujer, mientras el le agarraba la otra. En ese momento mi mujer empezó no a gemir sino a bramar y se sento en el chico viniéndose de nuevo, entonces el le dijo, “bueno amigos, ahora me toca a mi disfrutar el hermoso culo de tu mujer”, la puso a cuatro patas, me dijo que yo me sentara frente a ella y empezó a penetrarla, le dijo a mi mujer, “mamasela a el”, me acomode y ella se comía toda mi verga, mientras era empujada por los empujones que el de daba.
Luego el chico tomo la barra de lubricante y untó en sus dedos, me dijo, es momento de que ella disfrute todo su cuerpo, empezó a acariciarle el culo mientras seguía metiéndole su vergota, luego fue metiéndole un dedo muy suavemente que la hizo gritar, el le pregunto si le gustaba y ella dijo que que rico le estaba haciendo, solo aguantamos unos minutos cuando como si nos hubiésemos puesto de acuerdo los tres nos venimos como locos.
Acabamos rendidos, nos bañamos y el chico nos dijo, “espero que les haya gustado mis servicios y quedo a sus ordenes” Le dio un beso a mi mujer y se despidió.
Mi mujer y yo estuvimos todo el resto de la noche cogiendo como locos. Yo cumplí mi fantasía y ella quedo muy satisfecha y agradecida conmigo.
A partir de esa noche, hemos tenido otras experiencias muy ricas y diferentes. Que ricura de mujer tengo y me encanta que sea tan puta.
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