Tanto insistió mi esposo en que me fuera a coger con otro, hasta que llena de curiosidad y excitación decidi una tarde noche probar. Me vesti con una minifalda muy zancona y una blusa escotada con zapatillas altas y me fui a un antro, tome un taxi y le pedi al taxista que me llevara a algún antro donde asistieran sexo servidoras, eso le llamo la atención y me dijo que me llevaría a uno muy especial y que ahi ganaban muy bien las chicas del lugar, me dijo que estaba bien buenota y que si queria al terminar el pasaba por mi, le dije que estaba bien. Muy nerviosa entre al lugar que estaba semi oscuro, me recibió el capitan de meseros y le invente la historia de que estaba muy necesitada de dinero y que por eso queria trabajar, lo convenci y me dijo como se trabajaba ahi, que incluso ahi mismo había cuartos para coger con los clientes, me llevo a una mesa donde estaban dos jóvenes, me sente, de inmediato me llevaron una copa, ellos me empezaron a agarrar las piernas y cuando me sacaban a bailar, me agarraban de las nalgas, eso me fue provocando fuerte excitación, verme entre putas y ya tomados, uno de ellos muy joven por cierto, me dijo que nos fuéramos a coger, acepte y le dije al mesero que nos llevara al cuarto, al llegar, el me desvistió, y ya encuerada me sente en la orilla de la cama y el se empezó a desvestir, cuando se quito el calzón me quede asombrada pues tenia una verga impresionantemente; enorme y mucho muy gruesa, me acosto y me abrió las piernas, me unto lubricante y empezó a meterme ese animalote, no me entraba por mas que empujaba, así que me unto en mi vagina mas lubricante, solo así fue entrando, me la fue metiendo tan despacio, que senti como se me iba abriendo la panocha, así la fue metiendo hasta que me senti totalmente llena, en ese momento tuve mi primer orgasmo, luego empezó a moverla de un lado a otro y me besaba el cuello que me vine otra vez, se acosto el boca arriba y me dijo que yo me subiera para que me la comiera toda, ya que solo me había metido la mitad, me subi y empece a meterme ese animalote que no alcanzaba a rodearlo toda con mi mano, me fui metiendomela hasta que le toque los huevos, casi no podia moverme de tan llena que estaba, empece a subir y a bajar hasta que me vine por tercera vez.
Luego me dijo que me pusiera de perrito, así me la dejo ir otra vez y empezó a decirme que era una puta muy sabrosa, que tenia unas nalgas muy bonitas y la panocha bien apretadita. Esas palabrotas me fueron excitando en lugar de molestarme, y le pedi que continuara, entonces el se solto diciéndome ramera, piruja culona, puta de putas, que rico aprietas culera, y me excite tanto que me vine junto con el riquísimo.
Cuando terminamos nos bañamos y sali de inmediato, el mesero me dijo que me sentara en otra mesa, ahi estuve solo bailando y bebiendo hasta que cerraron el lugar. Cuando sali ya estaba el taxista esperándome, me dijo que si me iba al hotel con el pero le dije que me dejaron bien rosada que en otra ocasión seria. al llegar a casa, mi esposo estaba muy caliente, le platique como me cogieron y eso lo excito mucho, como yo tengo mis consoladores enormes, saque uno y se lo empece a meter en el culo y a masturbarlo mientras le platicaba. Le encanto que me lo cogiera y desde entonces somos felices. Yo ya no quiero dejar de coger con otros, pues cada uno son diferentes. Me gustaría que comentaran con palabrotas ricas. mujeres bienvenidas.
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Relato porno: “Mi esposo me mando a coger y me gusto”
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